Tarta de chocolate y queso philadelfia
Preparación: 20 min, Cocción: 5 min para Raciones: 12
Ingredientes
Para la base:
350 gr de galletas de chocolate
170 gr de mantequilla
50 gr de azúcar
Pizca de sal
Para el relleno:
600 gr de queso crema tipo Philadelphia
200 gr de azúcar
250 ml de nata para montar
Para la ganaché de chocolate:
120 gr chocolate para fundir
120 ml nata para montar
Preparación
Comenzamos preparando un molde redondo y alto, desmontable (el de las fotos, de 18 a 20 cm. Puede usarse un molde más grande, pero la tarta quedará más bajita) Lo engrasamos ligeramente, o rociamos con un spray antiadherente.
Trituramos las galletas de chocolate con un robot de cocina, o metiéndolas dentro de una bolsa y golpeándolas con un rodillo, hasta que se conviertan en polvo.
Mezclamos este polvo de galletas con el azúcar, la sal, y la mantequilla fundida, hasta formar una masa con la textura de la arena mojada.
Distribuimos esta pasta de galleta sobre la base y los laterales del molde, presionando bien.
Metemos en el frigorífico mientras que continuamos con la elaboración de la galleta.
Preparamos la salsa de chocolate. En un cazo mediano, ponemos a hervir la nata.
Cuando hierva, retiramos del fuego y añadimos el chocolate troceado.
Dejamos reposar unos minutos y removemos con una cuchara hasta que se forme una crema homogénea.
Reservamos al menos 4 cucharadas colmadas de salsa de chocolate para hacer la decoración, y vertemos el resto sobre la base de galletas.
Volvemos a llevar al frigorífico mientras que seguimos con la elaboración de la tarta.
Preparamos el relleno de queso. Para ello, batimos el queso philadelphia con un batidor de varillas a velocidad media (o a mano, aunque tardaremos más), hasta que esté esponjoso, unos 3 minutos.
Reducimos la velocidad, y agregamos el azúcar.
Volvemos a poner a velocidad media-alta, y lo batimos hasta que esté muy esponjoso, otros 3 minutos.
Aparte, en un bol amplio, vertemos la nata que deberá estar muy fría, y la montamos con un batidor de varillas a velocidad máxima. Suele tardar un minuto y medio, o dos como máximo. No es necesario que esté perfectamente montada
Mezclamos la nata y la crema de queso con movimientos envolventes, despacio, para que el relleno no pierda esponjosidad.
Vertemos el relleno de queso sobre la base de galleta, y alisamos la superficie.
Golpeamos ligeramente el molde contra la encimera para eliminar posibles burbujas de aire.
Introducimos la crema de chocolate que habíamos reservado en una manga pastelera con boquilla pequeña, o un biberón de pastelería (si no disponemos de ello, podemos usar una bolsa de congelación, o de bocadillos, cortando una puntita).
Comenzando desde el centro de la tarta, dibujamos una espiral de chocolate.
Con un palillo, o el borde no afilado de un cuchillo, vamos dibujando líneas ligeramente curvas desde el centro de la tarta hacia el exterior, para formar el dibujo de tela de araña. Limpiamos el cuchillo o palillo antes de dibujar la siguiente línea, para no dejar restos. (lo mejor es hacer una prueba dibujando una tela de araña sobre un papel de hornear antes de pasar a la tarta, aunque como expliqué en la presentación de la receta, se puede repetir si sale mal)
Volvemos a llevar la tarta al frigorífico, donde la dejaremos de un día para otro antes de consumirla, o congelamos al menos una hora.
Si conservamos la tarta en el congelador, sacamos 15 minutos antes de consumir.
Desmoldamos con cuidado, pasamos al plato donde vayamos a servir, y a disfrutar!
Truco:¿Te preocupa que no te salga bien la decoración? Tiene solución:
1. Retiras con cuidado la tela de araña defectuosa con una cuchara,
2. Alisas la superficie de la tarta con el dorso de una cuchara humedecida con un poco de agua y vuelves a dibujar la tela de araña.
Via:http://www.larecetadelafelicidad.com/
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